Datos personales

Me gusta parecer sencilla aunque después tenga debilidad por lo imposible. Soy una fanática del mar al amanecer y anochecer; y de las cabezas despeinadas. Cotilla por naturaleza. Impulsiva en los momentos inoportunos. Me encanta obsesionarme con cosas invisibles. Me gusta regalar sonrisas sin pedir nada a cambio. Me apasiona tropezar con una misma piedra dos veces, pues a la tercera va la vencida. Soy de las que piensa que querer no siempre es poder, pero que rectificar es de sabios. El chocolate y los pañuelos al cuello son imprescindibles en mi vida, aunque no creo en lo imprescindible. Mi canción favorita es el ruido de las olas; y mi película, nuestra historia. Mi actriz favorita es mi madre, siempre hace un papelón. Y mi comida favorita son tus besos. Soy de beber agua más que lágrimas, y de respirar aire más que sarcasmo. Mi punto débil es la oscuridad y el fuerte es soñar. La ironía va conmigo de vez en cuando aunque mis mejores herramientas son las indirectas. Mi segundo paraíso es Londres, el primero es Málaga. Mi primer plato siempre será el mismo que el segundo, y lo mejor lo dejo para el final. Tengo la mala costumbre de enamorarme y la buena de mirar a los ojos...

domingo, 16 de octubre de 2011

¿Nunca te ha dado por mirar más allá? Como decía Rafiki... "Mira más allá de lo que ves"... ¿No lo has hecho? Yo suelo hacerlo. Será por eso que me meto siempre donde no me llaman. Me interpongo ante todo como si pudiera mejorarlo de buenas a primeras. Me lanzo al vacío, pensando siempre que habrá algo más. Busco siempre algo más. Como las ecuaciones que se acercan mucho mucho al 0 pero nunca llegan a tocarlo... Estoy segura de que llegan a tocarlo en algún momento. Yo he tocado ese 0, he visto más allá de lo que dices. He buscado más allá de tu ironía. Y sí, he encontrado razones para odiarme detrás de tu falsedad.¿Y te digo algo más? Tienes toda la razón del mundo. Te admiro. Pero no pienso seguirte el rollo ni un segundo más. Porque me duele todo lo que haces. ¡Y mira que no me tomaba nada en serio! ¡Para mí era casi un juego! Pero me he cansado. Me he cansado de escucharte, de regañarte, de hacerte ver la realidad. No voy a ser tan infantil como tú. Hasta siempre.

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