Frío.

Me pierdo cada vez que lo intento. Y es que todo esto ha cambiado demasiado. El aire sabe diferente, tus manos son ásperas y me han dicho que tu cama está fría. Tus ojos se han aclarado, como casi todo, pero yo los prefería oscuros. Nada es como antes, ni siquiera tus pies caminan al mismo compás. Tampoco a pasado tanto tiempo, o al menos eso creía... Tus vaqueros se desgastan al mismo ritmo que crece esa cresta tuya. Esa que asomaba rebelde entre ceja y ceja cuando te despertabas al mediodía. Tu barba ha perdido velocidad, qué inoportuna... Parece como si fueras otra persona, y eso está bien. Nadie mejor que yo deseaba que fueras otra persona. Nunca creí que lo conseguirías. Felicidades. (:

Perdona si te llamo amor.

- No va a funcionar, es como si me pusiera unos zapatos con los que no me siento cómoda. Lo siento.

- ¿Y qué te parece andar descalza durante un rato? 

Mi media naranja es más dulce que ácida ♥

Y ahora que ya sabemos lo que es una naranja, cada uno que busque su otra mitad. A veces será dulce, a veces será amarga. Os clavaréis las uñas, os dejaréis la piel. Y tened por seguro que os exprimirán primero por la izquierda y después por la derecha.

El poder de la música.

Frío y guitarra, una buena combinación. Todavía puedo ver cómo se me eriza la piel al pensar y aquella escena. Aquella en la que él y yo no estábamos en el mejor momento, pero la música sí. Ella siempre está ahí, donde tiene que estar.

 

Una canción no siempre es recordada por los buenos momentos que pasaste con ella, sino también por los malos. Y te sigue haciendo feliz escucharla una y otra vez porque te hace pensar en lo valiente y fuerte que fuiste. Gracias, caballero. Fueras quien fueras, vinieras de donde vinieras, quisieras lo que quisieras... Porque estuviste en el sitio adecuado, a apenas 8 grados, acompañado de cientos de personas que paseaban por tu lado con la nariz enrojecida. Tú y una sola canción. You are my wonderwall.

Un café con sal.

-Eres la persona que peor dibuja corazones con arroz tres delicias que he visto en mi vida...

2:00 am

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Silencio absoluto. Es lo único que necesitas para saber cuánto te importa una persona.

Y es curioso. Escuchar tus latidos relentizados y empezar a pensar en esa persona. Entonces, de forma automática tus latidos empiezan a acelerarse como si se tratara de un peligro. Así lo llama tu conciencia, peligro. Porque ya sabes lo que se sufre con esos latidos hiperactivos, sabes cuánto se llora...

Lo sorprendente viene cuando te das cuenta de que, mientras procesas todo eso en tu mente, tus labios se han revelado y están dibujando una sonrisa, como si el peligro y la sonrisa fueran de la mano. Como si la felicidad y el miedo fueran acaso compatibles. ¿Qué locura no? Así llamamos al amor, loco e impredecible. Y es que no te imaginas lo que se siente cuando aparece despeinado, cuando se enfada y encoje las cejas, cuando aprieta con fuerza los labios como si tuvieran la culpa de todo. Es como si estuviéramos programados a todas estas clases de reacciones...

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Príncipeeee?Noo! Mejor lobo!

  

Te ve mejor, te oye mejor y te come mejor...

Nadie puede darme lo que tú me das. Nadie.

Que el frío solo venga de visita apenas unos segundos... Los suficientes como para que te de tiempo de venir y arroparme entre tus largas piernas. Que los escalofríos que vienen incluídos en tus susurros sólo sean el aviso de que tu boca tiene sed de mí. Sed de mí. Has escuchado bien. Necesidad. Nada de caprichos. Porque ser un capricho es sinónimo de patalear y conseguirlo. Y no existen suficientes pataletas que hagan que me rinda. No existen antojos que me convenzan con falsos besos y falsas caricias de caderas. Porque entonces el frío llega de nuevo y esta vez para quedarse. Entonces ya no quedará nadie aquí. ¿Tienes idea de cuántos osos polares hay ahí fuera?

¿Me permites llorar de felicidad?

Nunca te han abrazado tan fuerte, ¿que se siente al mirarte en el espejo sonriente? Estrenar una sonrisa, que todas tus tristezas se hayan muerto de la risa. El corazón esta para romperlo 20 veces, 20 veces de la risa...

Hoy en mi ventana brilla el sol, y el corazón se pone triste contemplando la ciudad. ¿Por qué te vas?

Como cada noche, desperté pensando en ti y en mi reloj todas las horas vi pasar. ¿Por qué te vas? 

TODAS LAS PROMESAS DE MI AMOR SE IRÁN CONTIGO, ME OLVIDARÁS, ME OLVIDARÁS.
JUNTO A LA ESTACIÓN HOY LLORARÉ IGUAL QUE UN NIÑO, POR QUÉ TE VAS, POR QUÉ TE VAS.

Junto a la penumbra de un farol, se dormirán todas las cosas que quedaron por decir. Se dormirán.

Junto a las manillas de un reloj, esperarán todas las horas que quedaron por vivir, esperarán.

+Pero quererse no puede estar mal... Sólo quiero estar contigo. Tu y yo podemos hacer cualquier cosa.
-La única razón que tengo para seguir luchando eres tú. 

 

Un final de los que no me gusta imaginar...

Plato de buen gusto para nadie. Encontrarse de repente con los miedos frente a frente.
Y lucharlos sola porque ya no hay nadie, y matar las ganas de acabar este viaje.

Me cuesta creer que me mentías cada vez que me decías que me amabas sin medida.
¿Qué fue de los besos que pintaban los susurros que besaban mis canciones con poesía?
Que todo lo que tuvimos, todo lo que construimos, no ha acabado en más que una derrota.
Conteniendo el alma y las verdades, no todo se acaba aunque tú acabes.

Mira, no me quedan fuerzas pa’ engañarte, te has llevado casi todo lo que quise regalarte.
Pero no me hundo... de un tiempo a esta parte, comprendí que lo mejor aun queda por delante.

Yo que en realidad no puedo odiarte, no queda nada por mi parte y ahora demore tu viaje.
Y te echaré de menos, pero estás de más, ya no hay sitio para dos en éste, mi equipaje. 

Se supone

Para mí tiene un significado especial. Un significado real. Algo que es tangible, algo que uno puede tocar. Y habla por supuesto del amor, ¿de qué mas, verdad? Habla de lo difícil que es olvidar. Lo difícil que es cuando uno vive enamorado y esa persona, ese amor platónico, esa persona que amamos, no nos quiere. Muy difícil. Porque se supone que uno es fuerte, se supone que uno saluda a esa persona como si nada, como si todo va bien... -Eh ¿cómo estás? ¿todo bien? -Sí, chevere. -¿La familia bien? -No, bien bien, gracias a Dios... -¿El trabajo? -No, no, bien bien... Pero por dentro, te estás muriendo. Eso nos pasa a todos, ¿verdad?

A la altura justa de tus ojos

Mientras que hacemos el amor, el alma entre las manos. Y entre los labios los "te quieros" que me adornan las paredes de este cuarto al que me escapo a veces...

 

Tú, la luz que apaga todos mis temores ♥

-No soportas que te quiera, no soportas que te odie... Pues tú dirás.

-Prefiero que me quieras.

-¿Sabes lo que pasa? Que cuando te dije que yo no iba a estar esperándote siempre, te diste cuenta de que habías perdido algo. Y eso es lo que no soportas.

 

 

-Pero... no te preocupes, que... igual si te portas bien, aún podemos hacer algo. Tampoco... tampoco te odio tanto. Sólo un poquito.

-Yo tampoco te quiero tanto, sólo un poquito.

You've been here before.

Well I suppose you think that I’m so flattered to hear that I’m a whispered conscience in your ear, yeah. And that’s exactly the reason that I never fit in here. Well nothings ever that black and white my dear.. No..

But you say we don’t mess around. You’ve got no freedom to come down. We don’t take angels from the sky. Oh no. We don’t mess around. You’re meant to be among the clouds. Cause you’re an angel.
But that’s a lie.

I’m not your angel darling. I am never gonna be.